ANTECEDENTES.

La Laguna de Fúquene es un cuerpo de agua dulce de origen tectónico que corresponde a uno de los principales cuerpos de agua de los componentes hidrográficos de los ríos Ubaté y Suarez, representando así uno de los sistemas de abastecimiento hídrico más importantes de Cundinamarca y Boyacá, aprovisionando de este recurso a más de 650.000 habitantes (CAR, s. f). Sin embargo, a través de los años los procesos de la Laguna se han visto amenazados. Uno de los mayores riesgos que se ha presentado en la zona ha sido la invasión del buchón de agua (Eichhornia Crassipes) la cual es una especie invasora que no tiene muchos depredadores en su ecosistema natural, sumado a esto posee una velocidad acelerada de proliferación ocasionando que se tape el espejo de agua y que la laguna se colmate totalmente. (Semana sostenible, 2019)

De acuerdo a lo planteado anteriormente, esta especie ha causado impactos al ecosistema de la laguna afectando la entrada de luz y desplazando las especies nativas, alterando la dinámica natural de la vegetación lacustre y palustre de la zona. Además, estudios demostraron que desde el año 1955 esta especie ha crecido de una manera exponencial pasando de un área de 4 km2 a 21.4 Km2 en 2007, lo cual representa una significancia del 70% de expansión en el territorio (Bustamante, 2010). El crecimiento se presenta desde las áreas más someras hasta las áreas más profundas o, en otras palabras, su desarrollo se ha dado desde los bordes de la Laguna hasta las áreas centrales cubriendo inicialmente las zonas menos profundas que a su vez constituye un factor crucial en la desecación de la laguna. (Castillo y Rodríguez, 2017).

Por otra parte, otro hito sustancial que ha fomentado la invasión del buchón de agua es la ganadería, debido a que la Laguna se encuentra en una zona donde persiste una producción masificada de la industria lechera; dicha producción fomenta la reproducción de animales rumiantes, generando diversos impactos como el aumento de las concentraciones de los elementos químicos en la Laguna por parte de los excrementos de estos animales, los cuales aportan una carga del 70% de los contaminantes. Uno de los compuestos más relevantes encontrados en esta demarcación son los sulfuros de hidrógeno H2S expelidos por el buchón de agua, que en contiguo con los sucesos anteriores son las principales causas por las que favorece la eutrofización en la Laguna. (El tiempo, 2000).

Imagen 1. "Laguna de Fúquene".

Fuente. (El Tiempo, 2000)

Por esa época comenzó una política nacional de desecación de esos cuerpos de agua para el desarrollo de actividades agrícolas y ganaderas pues no se valoraba su importancia ambiental. De acuerdo con los registros históricos, hace 200 años Fúquene tenía 13 mil hectáreas de espejo de agua, hoy solo tiene 3.620 hectáreas. Con el paso de los años, y hasta mediados de los 90, hizo carrera una práctica perversa por parte de algunos propietarios de predios ribereños: aprovechar la época de verano y la disminución de los caudales para extender sus cercas y rellenar con tierra el área de la cual se habían apropiado. (Entre Ojos, 2018)

Sin embargo, aunque los sucesos mencionados anteriormente han impulsado la desecación y la sobrecarga de nutrientes en la zona no son los únicos, ya que la Laguna ha presentado diversos eventos antrópicos que han causado la disminución del espejo de agua. Estos acontecimientos datan desde su concesión en el año 1822, donde la Laguna con un área de 13.000 ha fue entregada para su desecación al capitán parís, pero este no logró su cometido. A partir de ese entonces la Laguna ha sido blanco de varios conflictos los cuales ha provocado un decrecimiento en su área de 12.000 a 471 ha en tan solo 200 años. (CAR, 2018) Posteriormente en el año 1984 surgió otra problemática con la construcción del canal perimetral parís, que se hizo con el fin de aumentar el desagüe de las zonas del río Suarez para la producción lechera, sin embargo, exacerbó la eutrofización y por ende la proliferación del buchón de agua, debido a la reducción del flujo hídrico y la acumulación de nutrientes. (González N, 2015)

Respecto a la problemática ocasionada en la Laguna, en el año 2000 la agencia de cooperación internacional del Japón (JICA) inició un plan de restauración que consistió en disminuir la población de las plantas acuáticas invasoras que se encuentran en este sector, entre ellas el buchón de agua que es una de las especies más abundantes de la zona. Proporcional a esto se demostró que la remoción ha sido ardua debido a la gran cantidad existente del buchón de agua en la región. Para ello se hicieron estimaciones para que se pueda remover por lo menos el 50% de esta especie que son 75 ha de material vegetal propulsada para antes del año 2020, cuya disposición final sea apta para ser compostada para utilizarlos en el cultivo de flores. (CAR, 2000)